Pues miren ustedes, para celebrar el estreno de la serie “Arrow” en Calle 13, hoy voy a hablar de uno de mis personajes favoritos de DC: Green Arrow. Y para terminar de coronar el asunto, voy a hacerlo de uno de los cómics que más ha marcado al personaje: Carcaj.
Esta saga se desarrolló durante los 10 primeros números USA de la serie que comenzó en 2001 del personaje. En España ha sido editada en dos ocasiones. La primera por Norma Editorial entre Mayo y Septiembre del 2002, en la serie limitada de 5 números del mismo nombre, a razón de dos números USA por ejemplar, con un formato prestigio de 48 páginas. La segunda fue de mano de Planeta en Mayo del 2009, en un “tomaco” de título “Green Arrow” (a secas), que no solía contenía estos diez primeros números USA, sino que recogía hasta el 21 de la serie. Este es el tomo con el que os tenéis que hacer, ya que además de “Carcaj” contiene las sagas “El Sonido de la Violencia” y “La Misión del Arquero”, compilando por completo las estancias de Kevin Smith y Brad Meltzer en la serie. ¡Casi nada! “Bocata di Cardinale” para los gourmets del buen cómic.
Antes he mencionado a Kevin Smith, y es que el conocido guionista y director de cine (con joyitas como “Mallrats” o “Clerks” en su haber) se ocupa de guionizar esta saga, con el hábil narrador Phil Hester como dibujante.
El argumento de este arco (nunca mejor dicho) argumental, es directo: Oliver Queen, alias Green Arrow, estaba muerto. Pero muerto de verdad, nada de “aparentemente”. Esto no es una artimaña ni nada por el estilo. Le estalló una bomba que le voló en pedazos. La vida ha seguido, y sus seres queridos le han llorado. Ahora bien, si Ollie esta muerto, ¿Qué hace vivito y coleando por las calles de Star City?
Con esta premisa, Kevin Smith se las ingenia para pegar un repaso no solo por los secundarios de Oliver Queen, sino por todo el Universo DC en general. Y es que, la resurrección del arquero tiene tela, puesto que tiene más miga de la que parece a simple vista. Y es que, insisto, estaba realmente muerto. Smith juega con eso, y le hace interrelacionarse con los diversos personajes que componen la trama de forma habilidosa, siempre jugosa, siempre fresca. El guionista, se muestra un hábil conocedor con la historia, y aquí me quitó el sombrero ante Mr. Smith, ya que su dominio de este Universo de ficción es máximo. Hasta le perdono el error de continuidad cometido con Wonder Woman.
El punto fuerte (además de lo ya mencionado) del guión, son los diálogos. Kevin Smith ya había demostrado en sus películas que lo suyo son las conversaciones y la dialéctica con chispa entre personajes, cosa que sigue sabiendo manejar en el medio de la historieta. Las conversaciones entre Ollie y Dinah, o entre Hal y Ollie, son brillantes y llenas de sustancia. Impresionante lo que hace el director de cine de Jersey poniendo palabras en boca de sus criaturas.
Y hablando de sus criaturas, Smith no solo se ocupa en esta magna saga de redefinir, actualizar, recomponer y restablecer los secundarios habituales del arquero de Star City, sino que incluso introduce nuevos, como Mia Dearden. Atentos a esta chica, que es uno de los mejores secundarios que ha parido madre.
Pasando a comentar el dibujo, debo confesar una cosa. Cuando pienso en Green Arrow, la imagen que se me viene a la mente del personaje, no es la de Neal Adams, ni la de Mike Grell, si no en la de Phil Hester.
Y es que pese a no ser un autor “hot”, Hester es una cosa que debería de abundar más en el mundo del cómic: un excelente narrador. Si hay algo en lo que este artista destaca, es en eso, en narrar de fábula aquello que la historia requiere. Lo mismo vale para un roto que para un descosido. Además es un gran dibujante de facciones, y las expresiones son otra de sus fortalezas. En cuanto a sus debilidades, se podría decir que lo suyo no es la espectacularidad, pero lo compensa con la profesionalidad que irradian sus páginas.
En conclusión, esta es una historia que has de leer y disfrutar, si o si. Un cómic lleno de momentos divertidos y al mismo tiempo épicos y trascendentales, no es algo que hay que tomar a la ligera. Yo ya he perdido la cuenta de las veces que lo he releído y me he sumergido en sus páginas.
Buscad sus aventuras en Manhattan Comics.
No hay comentarios:
Publicar un comentario