Hace más de medio siglo que allá por el 1959 y en la revista Pilote fueron presentados los irreductible galos que desde su aldea luchan contra la amenaza del Imperio Romano. Hoy en día, incluso en un siglo distinto al que fueron creados la franquicia de ASTÉRIX continua generando grandes beneficios ya sea en las reediciones de sus aventuras clásicas, como en las nuevas entregas por las que se pelean sus creadores y herederas o por las discutibles pero económicamente beneficiosas (si no no se continuarían haciendo nuevas entregas) adaptaciones cinematográficas.
Comienza la resistencia gala...
Pero como todo aquello que se convierte en un producto mercadotécnico, en sus comienzos la serie de ASTERIX fue un éxito inmediato debido a muchos factores. Por una parte, el creador y guionista de estos personajes fue René Goscinny, uno de los genios de la escritura europea que nos ha dejado obras maestras como LUCKY LUKE, IZNOGOUD o LAS AVENTURAS DEL PEQUEÑO NICOLAS. Su acompañante en los lápices, Albert Uderzo, aunque con un dibujo tosco y primerizo supo madurar hasta dotar a su trazo del tono caricaturesco y dinámico que ha sido marca de la casa de estos personajes.
...y la aldea está preparada
Pero la genialidad de ASTÉRIX es algo mucho más complejo. Considerada desde sus comienzos como una metáfora de la resistencia francesa hacia la ocupación nazi de la II Guerra Mundial, Goscinny supo enmascarar esta alegoría transportando la trama a la época de Julio César y dotando a los irreductibles galos del elemento fantástico-mágico-humorístico que supone la poción mágica del druida Panorámix.
Dame un poquito de poción, porfaaaaa
Y desde el punto de vista tebeístico, Goscinny sabe llegar a todos sus posibles lectores. Mientras que su carácter de aventuras, golpetazos y chistes visuales pueden gustar al lector más infantil, el lector más maduro disfrutará con sus referencias a la cultura popular y social del S.XX transportada inteligentemente al entorno del Imperio Romano.
¡A machacar legiones romanas! ¡Yupiiii!
Definitivamente, un cómic con numerosas lecturas, que no desagrada a nadie y que es un clásico del humor mundial gracias a sus personajes carismáticos y sus situaciones delirantes. Desde la aldea irreductible del cómic en Valencia que es Manhattan Cómics te obligamos a leer, perdón, te obligamos a disfrutar de estas peripecias galas.
P.D.Y la semana que viene el cómic que leer tiene es AGUJERO NEGRO de Charles Burns
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